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Siempre es importante ser precavidos cuando de información sensible se trata. La mayoría de los usuarios de Internet cometen errores en cuanto a la protección de sus datos, lo cual puede llevar a robo de información, suplantación de identidad, entre otras cosas, que en su mayoría suceden por no tener una contraseña lo suficientemente segura al momento de usar un servicio.
Es por eso que recomiendo tener presentes estos 5 sencillos puntos al momento de crear una contraseña para cualquier servicio.
Crea contraseñas largas
Y por largas me refiero a más de 10 caracteres. Hay una enorme diferencia entre una contraseña de 5 caracteres y una de 8. El tiempo que se necesita para poder crackear una contraseña aumenta brutalmente cada vez que se añade un caracter, por lo que 1 segundo que lleva agregar una letra/dígito/símbolo a una contraseña, podría significar miles de años de trabajo extra para un cracker de passwords.
Crea contraseñas complejas
No te limites a crear contraseñas solo con letras minúsculas. Si así lo haces, estarías limitando las posibles combinaciones ya que estarías usando solo el alfabeto (en minúsculas). Son 27 letras del alfabeto. Por ejemplo, si eligieras una contraseña de 5 caracteres con solo letras minúsculas, habría 14,348,907 de combinaciones posibles (27^5).
Por el contrario, si se elige una contraseña de 10 caracteres, las posibles combinaciones son 205,891,132,094,649, una cantidad mucho mayor. Pero ¿y si eligieras una contraseña con letras (mayúsculas, minúsculas), números y caracteres especiales?. El número de posibles combinaciones crecería estratosféricamente, haciéndole la tarea muy difícil a los crackers.
Usa contraseñas por capas
Idealmente se recomeidna que por cada servicio que se use, es necesario tener una contraseña diferente. En la práctica esto es difícil de lograr si no se tiene un manejador de contraseñas. Sin embargo existe otra opción llamada contraseñas por capas, o por niveles. El concepto es sencillo: separar las cuentas de alta prioridad o seguridad y aislarlas de las demás.
Por ejemplo, si se tiene una contraseña para manejar cuentas de banco, una para revisar el E-Mail del trabajo y una para el E-Mail de reserva. Es recomendable que cuando se creen cuentas, estas se clasifiquen en grupos, dejando siempre aisladas las contraseñas que tienen mayor peso (las que consideramos más seguras). De esta forma las contraseñas no se repiten tan frecuentemente.
Mantén tus datos privados, privados
A pesar de que esto suena muy trivial, hay gente que no tiene la precaución suficiente y en ocasiones comparte datos como su nombre de usuario. Si bien esto no puede parecer tan grave la verdad es que es cosa seria; gracias a técnicas como la ingeniería inversa es posible obtener más información con solo saber parte de ella (en este caso el nombre de usuario).
La recomendación es no compartir información personal con nadie. Por más mínima o irrelevante que parezca, la información personal debe mantenerse privada y secreta.
Evita las similitudes entre nombre de usuario y contraseña
Para fortuna de muchos, algunos sistemas no permiten que el nombre de usuario esté presente en la contraseña. Esta medida es excelente, especialmente para los usuarios que eligen como contraseña una variante del nombre de usuario. Es una pésima práctica que pone en peligro los datos.
Solo hay que ser un poco creativos y elegir cosas completamente opuestas en el nombre de usuario y en la contraseña. No le hagas la vida más fácil a los crackers y echa a volar tu imaginación. Si tienes curiosidad, puedes verificar qué tan segura es tu contraseña.
Vía | Dottech
Más información | Combinations and Permutations
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